jueves, 2 de mayo de 2013

Maratón de Madrid 2013

Y llegó el día. El día que corrí mi primera Maratón. Con todo en contra, sin un entrenamiento apropiado pero con las dos cosas que, después de haber experimentado lo que es correr 42195m, son las más importantes: Ilusión y tener la cabeza en su sitio.
Menos mal que Manolo me sacó esta foto, que si no me quedo sin mi foto típica pre-carrera
Pongámonos en situación: Tras un entrenamiento bastante pobre en materia de este tipo de pruebas, lo único que me queda tras haber corrido el Medio Maratón de Valdemoro, es relajarme y tomarme la carrera como una más aunque no lo sea. Total, menos la primera vez que corrí 21km una semana antes del Medio Maratón Villa de Madrid, en la cual acabé bastante cansado, las otras 3 veces terminé bastante fresco, siendo la semana antes de la maratón la que mejor: casi 21km y como si hubiera salido una horita a correr.

Aunque hay un pero. Todas esas veces he contado con un clima genial y favorable. Tiempo templado, sin viento, tirando a calorcito... una delicia porque no me gusta correr con mal tiempo. Habrá gente que no le importe o que "el entrenamiento es el entrenamiento", pero es que si no hace "bueno" a mi no me motiva correr.
Tras 1h en el ropero, llegamos Ángel y yo al cajón de salida
Toda la semana del 28 de abril mirando el tiempo y siempre SIEMPRE aparecía el domingo despejado de lluvias y mal tiempo hasta el sábado 27 por la tarde que me vuelvo a meter mientras estoy poniendo el iPod fino de música motivante: Va a llover durante la carrera. Y no sólo eso: Rachas de viento fuerte todo eso aderezado con temperaturas de unos 3º con una sensación térmica de 0º. Genial. Eolo, me cago en tu puta madre.

Pero esa noticia no me tenía que minar la moral, llevo mucho tiempo preparándome para ello y qué coño, esto es como las hipotecas: es lo que hay y punto.

Así que nada, te preparas tu ritual pre carrera gorda que es: Comer hidratos de carbono durante dos o tres días antes y desayunar 3 horas antes. Y eso duele: Desayunar a las 06:00 es un dolor. Lo preparas todo: El pulsómetro, el Nike+ para registrar la distancia (si, no tengo un megarelojdelaostia que lo lleve todo incluido), las medias de compresión, las zapatillas, 3 barritas energéticas que llevaré en un bolsito en el tobillo para no desfallecer, calcetines acolchados, la pastilla de la alergia, un omeprazol para protegerme de una mala digestión... y pones rumbo a Recoletos. Y ahí te das cuenta DE QUE NO HAS COGIDO EL IPOD. No he corrido nunca más de 10 minutos sin música. Los nervios me tenían que jugar alguna mala pasada.

Una vez dejada la ropa en el ropero, en pantaloncitos cortos y manga corta(pero con una braga) comienza lo que van a ser 4h 15' de felicidad. Porque no sé cómo explicar lo bonito y espectacular que es correr por todo Madrid. Si si, TODO. Este fue el recorrido de la carrera:
Desde Chamartín hasta el Parque de Atracciones 
Así que nada, comienzo la carrera suave, muy suave, midiendo las pulsaciones para que estén por debajo del umbral anaeróbico y que me permitan no desfallecer. Sin música, mezclándome con la gente oyendo sus conversaciones, mirando sus zapatillas (es increíble la variedad que hay). En el kilómetro 10 me como una barrita energética. Sin cansancio: En este punto ya he pasado por el Bernabeu, las Torres Kio... todo muy bonito, pero queda lo mejor.

Continúas por Nuevos ministerios y Cuatro Caminos y llegas a lo mejor de la carrera: San Bernardo, Bilbao, Fuencarral, Gran Vía, Callao, bajando por Preciados hasta Sol... Aquí es dónde me esperaba Shei y mis padres. En Preciados para darme el iPod y si necesitaba algo más.
Cara de sorpresa al ver a mi madre, que no podía venir por el curro.
Una sorpresa lo de mi madre, porque por turnos no podía cambiarlo, pero se ve que si. Necesito el iPod para correr, que de momento llevo algo menos de 2h y cuando necesite poner la cabeza en blanco lo voy a notar.
¡El iPod el iPod!
¡Nos vemos en la casa de Campo! La tobillera donde llevo las barritas parece una pulsera de orden de alejamiento
Continúas por Sol, pasando por la calle Mayor hasta el Palacio de Oriente... es indescriptible lo bonito que es correr por allí
Genial lo de los escenarios durante el recorrido. Yo les sacaba los cuernos a todos.
Pasando el control de media maratón, me como otra barrita con isotónica. Ni rastro de cansancio. Parece increíble lo que una cabeza fría puede hacer: Bloquear la sensación de cansancio para hacerte aguantar más. Una vez en la casa de campo, me esperan otra vez mis padres y Shei, que me verán en el kilómetro 26 y medio y en el 31 y medio, ya que entre esos dos puntos solo hay un paseín. De ahí se irán a la meta.
Lo importante de esta foto no soy yo pidiendo paso para saludar a mi gente, es el platanito que me iba a dar Shei
Tras comerme el platanito que Shei me había traido (pa no comer siempre barritas) me enfrento al temible muro de la maratón: El kilómetro 30. Pues para mi fue igual que el 29 y que el 31. Cabeza fría, cabeza fría y sin parar. Suave y sin parar.
Ni muro ni leches.
Queda entonces lo más duro, los últimos 10km los cuales casi todos son cuesta arriba. Pues con la misma tónica sigo. No hay que pensar "joder con esta subidita" ni "en una carrera en reposo de 10km me canso... y ya llevo 32km..." no hay que pensar en nada. Sólo correr. Y aquí viene algún problemilla.

Si de normal subir una cuesta es difícil, con mucho frío, algunas gotitas de lluvia y el jodido aire soplando en contra, le añaden un plus de hijoputismo. Pero no hay que pensar en nada. Sólo correr.
Km 39, subiendo la ronda de Atocha con viento gélido de cara
Ya no queda nada, ya no queda nada, dos subidas (Alfonso XII y calle Alcalá) y es tuyo. Y vaya que si fue mío. Entras en el retiro con pocas fuerzas, pero casi con lágrimas en los ojos porque no puedes creerte lo que acabas de hacer. Acabas de correr una maratón. Sin parar y sin sufrir en exceso.
Dos partes de satisfacción por cada una de cansancio.
Y ya está. Lo has hecho y lo puedes contar.

La carrera es increíble e impresionante, pero la organización es para echarlos de comer aparte. Al menos yo no me quedé sin la medalla (como ha habido numerosos casos)
¡Conseguido!
Así que si pudiera viajar en el tiempo, me encantaría tomarle el pelo a mi yo de 11/12 años y decirle: Tu, si tu: El 28 de abril de 2013, correrás tu primera maratón.
Fotos de un maratoniano a la muy tierna edad de 12 años.
Mirando estoy hacia el 17 de noviembre la maratón de Valencia. Si no he acabado muy tocado (aún tengo algunas molestias en el pié izquierdo y en la rodilla derecha) serán dos maratones en un año.

Si, se me ha ido esto completamente de las manos.

PD:La próxima carrera por dios, que alguien me diga antes que ponerme asín la bandana recogesudores me hace orejas de soplillo :)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Genial el relato. Mis felicitaciones

Nos vemos por las calles!!